lunes, 27 de enero de 2014

En buenas manos

Hace varios años me tocó pasar por la sala de cirugía. Tenía un problema de cálculos en la vesícula, así que irremediablemente tenían que sacarla. Unos meses antes había pasado por una cirugía de apéndice con el mismo cirujano, así que pensé que no tenía mucho porque preocuparme ya que anteriormente había hecho un buen trabajo. Todo fue muy bien, la recuperación fue rápida, y aquí me tienen dando lata.


El Salmo 18: 30-36 me muestra que estoy en buenas manos. El Rey David hace un recuento de su vida y como Dios le ha acompañado en ese caminar.
"En cuanto a Dios, perfecto es su camino, y acrisolada su palabra; Escudo es a todos los que en Él esperan.
Porque ¿Quien es como Dios sino sólo Jehová? ¿Y que roca hay fuera de nuestro Dios?
Dios es el que me ciñe de poder, y quien hace perfecto mi camino; Quien hace mis pies como de ciervas, Y me hace estar firme sobre mis alturas; Quien adiestra mis manos para la batalla, para entesar con mis brazos el arco de bronce. Me diste asimismo el escudo de tu salvación; Tu diestra me sustentó y tu benignidad me ha engrandecido. Ensanchaste mis pasos debajo de mí, y mis pies no han resbalado."
En primer lugar David hace un reconocimiento de Dios y después hace un reconocimiento de lo que Dios ha hecho en su vida.

I- Reconocimiento de Dios.
David reconoce que los caminos del Señor son perfectos. Con esto David reconoce que todo lo que Dios ha planeado para su vida es perfecto. Que curioso que David hace este salmo al estar huyendo de Saúl, en condiciones nada cómodas, viviendo como nómada en el desierto; pero David nos asombra con esta declaración: Los caminos de Dios son perfectos. Me hace pensar en los momentos difíciles de nuestras vidas, las enfermedades, la falta de trabajo, las carestías; todo ha estado en las manos de Dios. Si hay pasajes dolorosos como la pérdida de un ser querido, pero todo ha estado en las manos de Dios.
El problema con esto es que nunca vamos a entender porque Dios está haciéndonos pasar por las duras circunstancias que vivimos. Posiblemente después las logremos entender.
El segundo reconocimiento de Dios es que su Palabra es acrisolada. El crisol es un instrumento de laboratorio que permite purificar elementos. El oro como metal precioso es purificado por el calor de un crisol. Con esto David nos muestra que la Palabra de Dios es pura, no tiene mentiras sino que lo que promete lo cumple. Volviendo a las circunstancias difíciles de nuestras vida, lo que nos permitirá salir adelante en los desalientos es La Palabra de Dios, sus promesas que se cumplen aun que las circunstancias sean adversas. En lo personal son las promesas de Dios las que me permiten seguir adelante.
¿Estas pasando por un momento difícil? Es hora de buscar las promesas de Dios, su palabra no tiene error, lo que cumple lo promete. Solo una advertencia, el cumple sus promesas cuando el quiere no cuando tu lo quieres, recuerda que Dios no está domesticado. Nuestra misión es esperar y ahí es donde se prueba nuestra paciencia. 
El tercer reconocimiento de Dios es: "Es escudo" y "Roca" con esto David nos muestra que Dios es alguien que nos da seguridad y protección. Cuando estamos en sus caminos podemos sentirnos seguros.
La figura de roca es un lugar fuerte donde puedo defenderme de los enemigos, algo así como un gran peñasco donde puedo defenderme de cualquier ataque del enemigo. 
El rey Herodes el Grande gobernó en Palestina en el tiempo que nació el Señor Jesús, tenía enemigos por todos lados en especial en Egipto donde gobernó Cleopatra. En vista de esta gran amenaza construyó en la cima de una montana una fortaleza llamada Masada, de esta forma Herodes podía huir ahí y estar seguro de cualquier amenaza. Dios dice ser una roca, un escudo. ¿A quien acudes cuando te sientes amenazado(a)?
Por último David reconoce: "Solo Jehová es Dios." No existen otros dioses, solo Jehová es Dios. Si el es el único Dios significa que debo de darle la adoración que merece. No solo es una roca sino que es Dios y que merece ser adorado por lo que el es. 
Puedo sentirme en buenas manos porque mi Dios tiene el poder, es Dios, todo lo sabe, es todo poderoso, esta presente en todo lugar, es Dios. ¿Como reaccionas a esto? ¿Puedes sentirte seguro(a) con alguien así? David si se sentía seguro, así como tu y yo podemos sentirnos en buenas manos reconociendo a Dios en nuestras vidas. 
¿Tienes problemas? ¿Estas desesperado? ¿Crees que no hay solución? Es tiempo de buscar la ayuda en el mismo lugar donde David se sentía seguro.

Seguiré con lo que Dios hizo en David en la próxima.

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