miércoles, 15 de enero de 2014

Conocido, acompañado y formado

Salmo 139: 1-18

Este Salmo se indica como Salmo de David. En este Salmo David medita en su relación con Dios.
Hay tres divisiones en este pasaje: La primera va desde vr.1 al vr. 6 y toca el punto de que tanto me conoce Dios. La segunda división vr. 7-12 y habla de la compañía de Dios en todo lugar y la última división vr. 13-16 habla de Dios como su formador.

I- Dios conoce todo de mi vr. 1-6
David comienza con esta declaración: me has examinado y conocido v. 1
Lo que Dios ha hecho es analizarme y conocerme. Dios sabe como soy, Él conoce mis pensamientos vr. 2, sabe lo que me gusta y lo que no me gusta. Dios conoce todos los pasos que he dado vr. 3 “Todos mis caminos te son conocidos, sabe lo que he hecho y lo que no. Pero lo más sorprendente es que mi Dios sabe lo que voy a decir con anticipación “aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí oh Jehová tu la sabes toda.” Dios tiene un conocimiento perfecto mi.
Debido a este conocimiento, Dios ha hecho dos cosas según el vr. 5: 1- Me rodeo y 2- Puso sobre mi su mano. Estas dos cosas habla de protección. La NVI lo traduce asi este versículo: Tu protección me envuelve por completo; me cubres con la palma de tu mano. No solo estoy protegido en todas direcciones sino que la mano de Dios está sobre mi.
La reacción de David ante esta realidad es de sorpresa Tal conocimiento es demaciado maravilloso para mi. A tal grado que no lo puede entender, Alto es, no lo puedo comprender.

II- Dios me acompaña en todo lugar vr. 7-12
David comienza con la pregunta ¿A dónde me ire de tu Espíritu?. ¿Y a donde huiré de tu presencia?.
Es como si preguntara ¿Existe algun lugar en el mundo donde pueda esconderme de Dios? ¿Será que puedo esconderme en las alturas del cielo?. Claro que no. ¿Podre esconderme en el Seol?. No lo creo. ¿Que tal si huyo mar a dentro?. Definitivamente no me podre esconder. Jonás quizo hacerlo y no lo logró. ¿Y podre esconderme en la oscuridad de la noche mas oscura de su presencia? David responde que lo mismo le son las tiniebla que el día. Eso no le impide estar lejos de mi.
Esto me da un consuelo y una advertencia: El consuelo es que no estoy solo, Dios me acompaña en todo momento y a todo lugar. La advertencia es que como soy acompañado por Dios en todo momento; entonces Dios sabe todo lo que yo hago, tanto lo bueno como lo malo. En este preciso momento, mientras lees estas palabras Dios está junto a ti y te acompañara a donde quiera que vallas.
Ese es el problema con los cristianos hoy en día. No estamos concientes de la presencia de Dios en mi vida. Dios me acompaña en todo lugar y en todo momento. Si solo estubieramos concientes de su presencia creo que vivieramos en el temor de Dios.

Lo tercero que recalca David.
III- Dios me ha formado vr. 13-18
En el vr. 13 dice: “tú formastes mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre.”
Mi origen está en Dios, Él me hizo, Él me formó, de dió el color de piel, de ojos, de cabello. El Salmista dice: “en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas. Sin faltar ninguna de ellas.” Todo lo que tu decretaste que fuera fué hecho. Mi cuerpo fue planeado y formado por Dios. Lo que me maravilla es que no existe nadie como yo, podrá haber parecidos pero si pensamos que somos millones de personas las que vivimos en el mundo y ninguna es igual a mi. Eso si que es realmente sorprendente. Nadie es identico a ti, lo que te hace especial y exclusivo. ¿No lo crees?.

Tenemos un Dios espectacular, un Dios personal, no uno que se sienta a ver a la humanidad sin intervenir en ella, sino uno que te conoce intimamente, uno que te acompaña y uno que te ha formado. Frente a un Dios asi ¿Como reaccionas ante Él? ¿Le ignoras o le prestas atención y descubres el propósito que Dios tiene para tu vida?. Recuerda que no puedes engañarle ni esconderte de Él

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