miércoles, 7 de abril de 2010

Ataco, un pueblo encantador

En las pasadas vacaciones de Semana Santa, tuvimos la oportunidad de escaparnos del sofocante calor de San Salvador.
Con mi familia siempre hemos preferido las montañas en esta época del año, asi que nos fuimos para Ataco en el departamento de Ahuachapán. Situado en la cordillera Apaneca-Ilamatepec lo hacen un pueblo con un clima fresco. Muy agradable.

Este es un pueblo muy pintoresco, las casas con las paredes pintadas con un estilo muy peculiar. Otro de las atraciones del pueblo de Ataco son sus artesanias. Son muy creativas, desde teñidos de añil, aretes de coco (hechos de la corteza del fruto), puertas antiguas pintadas con oleo, culebras de madera etc.





La más famosa de las tiendas de artesanías es Diconte, se conoce por sus paredes pintadas con figuras de gatos.
De hecho hay artesanias de gatos. Es facil de hubicar.
Tienen un telar y se puede ver como se elabora las telas que ocupan para las prendas de vestir que tienen a la venta, ademas venden una quezadia de maiz muy deliciosa.





La oferta gastronómica de Ataco es sorprendente, hay un restaurante de comida española, otro de comida francesa, y los tipicos que no pueden faltar.

Existen hoteles afuera del pueblo muy lindos como el Jandin de Celeste, Alicante Etc. En esta ocación decidimos quedarnos en el pueblo en el Santo Domingo, lo que fue muy agradable porque nos permitió caminar en la noche por las calles de Ataco.
El hotel Santo Domingo no tiene mucho parqueo (solo caben tres carros) asi que mi carro quedo afuera, al dia siguente esperaba verlo con algún vidrio quebrado, lo que afortunadamente no paso y me demostró que existen lugares sanos todavia en El Salvador. Que envidia ¿no?




Por último, les recomiendo pasar al beneficio el Carmen, está en la entrada de Ataco, tienen caballos, cuadrimotos, recorrido por el beneficio para ver como se hace el café y canopy. Se la pasa muy bien y tienen un area de juegos para peques (Los que disfrutaron mi sobrinita y mi hijo meñor)
Si desea un contacto con la naturaleza se puede hacer un recorrido entre el cafetal a pie o a caballo.
Hay una cafetería para poder llenar el tanque con hamburgesas. papas fritas, hot dogs.


En esta cafetería sirven un rico café gourment (café Ataco)
Lo más gracioso del beneficio el Carmen fueron unos caballos ponis, aunque son muy temperamentales.



Fue para nosotros un tiempo relajante y diferente.



Les recomiendo Ataco.

2 comentarios:

Óscar Perdomo León dijo...

¡La belleza de nuestro querido país!

Jonathan, lo felicito por esta breve crónica de su viaje al occidente de El Salvador.

Espero ver más con los días y las semanas, y que esta bitácora se enriquezca con el tiempo más y más con fotografías, opiniones y narraciones.

JonathanCruz dijo...

Muchas gracias Dr. Perdomo, seguiremos compartiendo.
Saludes.