“La iglesia organizada esencialmente permanece sin cambio semana a
semana, mes a mes, año tras año”
Pastor Romeo Guevara
Pastor Romeo Guevara
El día de ayer me reuní con una bella pareja que recién ha comenzado a
congregarse con nosotros en la iglesia Pan de Vida. Compartimos unas dos horas
platicando de los retos de la iglesia y algunas cosas que sentían diferentes
con la nuestra. El hermano me comentaba que desde niño ha sido criado en la
iglesia “cristiana” pero nunca alguno de los pastores se había acercado hablar
acerca de cómo estaba desarrollándose su relación con Dios.
En medio de la plática mis hermanos me comentaban que lo principal de
la iglesia era asistir fielmente y cumplir con su ministerio, si alguien
faltaba al culto las hermanas le visitaban en la semana siguiente y si faltaba
a su servicio (ministerio) sin justificación el pastor se encargaba de mandarle
una advertencia con riesgo de ser expulsada de la iglesia. Casi no dormí de
pensar en ¿qué clase de iglesia era esa? Pero ha hecho pensar en que es lo que
hace crecer y madurar una iglesia.
Pedro
escribe “Desead, como niños recién
nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para
salvación” 2 Pedro 2:2
Lo que hace
crecer una congregación es la Palabra de Dios. Con esto quiero aclarar a que
significa la Palabra de Dios. Es la Biblia misma la que dará a cada creyente la
madurez necesaria para madurar. No existe más.
Si lográramos que nuestras iglesias tengan el contacto fresco con la
Biblia, haciendo que ella nos hable libremente lograremos tener madurez en
nuestras congregaciones. Contésteme las siguientes preguntas ¿Cuántas personas
en su iglesia apartan un tiempo para
leer la Biblia y tratar de escuchar la voz de Dios? ¿Cuántas personas en su
iglesia han leído la Biblia al menos dos veces en su vida?
Este
contacto diario con la palabra de Dios no debe de ser exclusivo de pastores y
lideres, conozco algunos que su contacto con la Biblia es más académico que
devocional. Cada vez que abrimos ese libro estamos abriendo la misma voz de
Dios, nos muestra sus deseos, promesas, mandamientos y sus planes.
Entonces
¿Qué podemos decir de los sermones? ¿Se podrían considerar Palabra de Dios?
Menciono esto porque está la creencia que las personas crecen a puro sermón.
Nuevamente me quiero referir a Pedro, note como tiene que ser esa leche
para poder dar crecimiento, dice que esa leche (palabra) es NO adulterada. Y
este es el gran problema. Muchos de los mensajes que se predican no son Palabra
NO adulterada, son una mescla de versículos con mensajes positivos. Al decir
esto quiero hacerlo con la mayor seriedad posible, muchos pastores no están
predicando la Biblia, están predicando sus ideas y comentarios acerca de la
Biblia. Predicar acerca de la Biblia es completamente diferente a predicar La
Biblia, el primer caso es como diluir la leche con agua para poder temer más
litros que vender. ¿Cuándo estás preparando el mensaje estas escuchando la voz
de Dios o solo es un desarrollo lógico de tus ideas?
A
algunos pastores no les gusta predicar la Palabra porque es confortativa y a
las personas no les gusta los mensajes así, no predican por temor a que las
ovejas se vallan. Pues es mejor que se vallan a otro lado y trabajar con los
que se queden, vas a hacer mas con los 20 o 30 o 50 que se quedan que con los
100 que no quieren nada con la Palabra de Dios. Tu fidelidad en con El Señor no
con las personas y más aquellas que quieren imponer sus formatos a la obra del
Señor.
En resumen hay un solo factor de crecimiento para la Iglesia y esa es
la Palabra de Dios, esta palabra tiene que ser aplicada en dos formas 1-
Contacto diario y personal y 2- Exposición pública y fiel de la Palabra de Dios
desde el Púlpito.
Es mi
sincera oración que asumas el compromiso que como líder y siervo de tu iglesia
te corresponde y comiences tu crecimiento espiritual y el de tu iglesia como
nunca antes lo has experimentado.
AMEN