jueves, 6 de febrero de 2014

El Factor de crecimiento



“La iglesia organizada esencialmente permanece sin cambio semana a semana, mes a mes, año tras año”       
Pastor Romeo Guevara

El día de ayer me reuní con una bella pareja que recién ha comenzado a congregarse con nosotros en la iglesia Pan de Vida. Compartimos unas dos horas platicando de los retos de la iglesia y algunas cosas que sentían diferentes con la nuestra. El hermano me comentaba que desde niño ha sido criado en la iglesia “cristiana” pero nunca alguno de los pastores se había acercado hablar acerca de cómo estaba desarrollándose su relación con Dios.
En medio de la plática mis hermanos me comentaban que lo principal de la iglesia era asistir fielmente y cumplir con su ministerio, si alguien faltaba al culto las hermanas le visitaban en la semana siguiente y si faltaba a su servicio (ministerio) sin justificación el pastor se encargaba de mandarle una advertencia con riesgo de ser expulsada de la iglesia. Casi no dormí de pensar en ¿qué clase de iglesia era esa? Pero ha hecho pensar en que es lo que hace crecer y madurar una iglesia.
Pedro escribe “Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación” 2 Pedro 2:2
Lo que hace crecer una congregación es la Palabra de Dios. Con esto quiero aclarar a que significa la Palabra de Dios. Es la Biblia misma la que dará a cada creyente la madurez necesaria para madurar. No existe más.
Si lográramos que nuestras iglesias tengan el contacto fresco con la Biblia, haciendo que ella nos hable libremente lograremos tener madurez en nuestras congregaciones. Contésteme las siguientes preguntas ¿Cuántas personas en su iglesia apartan un tiempo  para leer la Biblia y tratar de escuchar la voz de Dios? ¿Cuántas personas en su iglesia han leído la Biblia al menos dos veces en su vida?
Este contacto diario con la palabra de Dios no debe de ser exclusivo de pastores y lideres, conozco algunos que su contacto con la Biblia es más académico que devocional. Cada vez que abrimos ese libro estamos abriendo la misma voz de Dios, nos muestra sus deseos, promesas, mandamientos y sus planes.
Entonces ¿Qué podemos decir de los sermones? ¿Se podrían considerar Palabra de Dios? Menciono esto porque está la creencia que las personas crecen a puro sermón.
Nuevamente me quiero referir a Pedro, note como tiene que ser esa leche para poder dar crecimiento, dice que esa leche (palabra) es NO adulterada. Y este es el gran problema. Muchos de los mensajes que se predican no son Palabra NO adulterada, son una mescla de versículos con mensajes positivos. Al decir esto quiero hacerlo con la mayor seriedad posible, muchos pastores no están predicando la Biblia, están predicando sus ideas y comentarios acerca de la Biblia. Predicar acerca de la Biblia es completamente diferente a predicar La Biblia, el primer caso es como diluir la leche con agua para poder temer más litros que vender. ¿Cuándo estás preparando el mensaje estas escuchando la voz de Dios o solo es un desarrollo lógico de tus ideas?
                A algunos pastores no les gusta predicar la Palabra porque es confortativa y a las personas no les gusta los mensajes así, no predican por temor a que las ovejas se vallan. Pues es mejor que se vallan a otro lado y trabajar con los que se queden, vas a hacer mas con los 20 o 30 o 50 que se quedan que con los 100 que no quieren nada con la Palabra de Dios. Tu fidelidad en con El Señor no con las personas y más aquellas que quieren imponer sus formatos a la obra del Señor.
En resumen hay un solo factor de crecimiento para la Iglesia y esa es la Palabra de Dios, esta palabra tiene que ser aplicada en dos formas 1- Contacto diario y personal y 2- Exposición pública y fiel de la Palabra de Dios desde el Púlpito.
Es mi sincera oración que asumas el compromiso que como líder y siervo de tu iglesia te corresponde y comiences tu crecimiento espiritual y el de tu iglesia como nunca antes lo has experimentado.
AMEN